Siendo cabrero y quesero, y viviendo de verdad la vida del campo, la vida de una granja casi como las de antes. Esta experiencia te va a gustar tanto que te vas a querer a vivir aquí.

Compartiremos contigo nuestra receta familiar de queso fresco. Al final de la mañana, moldearás tu propio queso. Una pieza llena de tradición que se convertirá en un recuerdo comestible para irse a casa contigo.

Mientras mezclamos los ingredientes y sucede la magia, te contaremos historias de nuestra sierra y de cómo nuestra familia llegó a estas tierras hace casi 100 años.

Luego llega el esperado momento de conocer de cerca a nuestras queridas cabras payoyas, y si te animas, prueba el arte del ordeño tradicional antes de que salgan a pastar para no regresar hasta la mañana siguiente.

Luego, manos a la obra: crea tu propio queso con tu toque personal que te hará un artesano del queso. Mientras se asienta, disfruta de un pequeño video que revela los secretos de nuestra quesería.

Para el gran final reservamos una cata de nuestros quesos aplicando los cinco sentidos y regándolo con un buen vino local que resalta su esencia.

Y si quieres llevar un poco de Crestellina a tu casa, nuestra tienda te espera llena de productos locales seleccionados con el mismo amor y criterio que ponemos en cada uno de nuestros quesos.